En nuestro entorno, hay personas que siguen generalmente los patrones establecidos, otros que se salen un poquito de esos patrones y otros que marcan la diferencia. No hablo de una diferencia visual, física, de vestir de una forma u otra, de ver documentales en vez de programas del corazón,…(qué también, en muchos casos, es un acto de valentía mostrarse diferente a la multitud).
Hablo de una diferencia en el Ser.
Hace unos días quedé con una amiga, de esas con las que es muy fácil tener una conversación profunda y entrar en ese universo donde se habla de lo esencial de la vida. Ella me decía que conoce a pocas personas que rompan y salgan del concepto de éxito generalizado y luchen por lo que quieren de verdad para sus vidas. No me refiero a pasar por encima de cualquiera para conseguir lo que se desea, no es eso.
Es un concepto mucho más generoso de obtener aquello con lo que sueñas.
Socialmente se ha impuesto una idea de éxito asfixiante. Cada persona tendría que tener su propia idea de éxito. – Sergio Fernández.
Personas que no dejan de perseguir sus sueños y trabajar hacia ellos sin saber muy bien cómo hacerlo.
Cometiendo errores, intentándolo una vez más cada día, sin ningún manual que indique cómo conseguirlo. Buscando personas y libros motivadores que empujen a seguir porque demuestran que ese mundo que quieres es posible. Estudiando. Reinventándose todas las veces que haga falta. Trabajando mucho más la parte espiritual porque es la que les hace más fuertes. Descubriendo bloqueos internos y creencias tienen que les limitan a conseguir lo que desean.
No es fácil. Es un trabajo constante. Donde tienes que trabajar la autoconfianza, el autoestima, la automotivación y la autodisciplina.
Y mientras tanto, por otro lado, escuchando (sobre todo por parte de familia y amigos) comentarios negativos, de derrota, de “estás perdiendo el tiempo”, de incomprensión al querer otro estilo de vida en el que diga cada día “me apasiona lo que hago” en vez de “lo importante es tener un trabajo, ya tendré vacaciones para hacer lo que quiera”.
No es fácil pensar y sentir diferente.
Hay muchas creencias en todos nosotros. Y mostrarle a la gente que hay otro tipo de vida con la que eres más feliz y coherente con tu Ser, es romper con los esquemas establecidos.
No es fácil. La gente te cuestiona mucho porque no entiende ese tipo de pensamiento o forma de vida.
El éxito personal es un proceso interior, y el reconocimiento del éxito es un evento exterior. No siempre coinciden en el tiempo, ni tampoco necesitas este último. – Raimon Samsó
Desde pequeña he sido “la rara”. Me pasaba horas leyendo (en mi familia casi nadie leía por diversión), me gustaba pasar tiempo sola, en mi casa era la más callada, de adolescente no me gustaba salir de fiesta, prefería excursiones, cine, playa con mis amigos, antes que salir de noche a beber.
No me gusta beber alcohol y nunca me he emborrachado, ni fumado (cosa que les costaba creer a mis amigos cuando hice el Erasmus ).
Siempre me han interesado los libros de autoayuda y desarrollo personal. Algunos de ellos me han cambiado la vida (El Poder del Ahora, me salvó).
Comencé a hacer yoga y meditación hace unos 10 años, cuando era “raro” y no una moda. Iba en bici por la ciudad cuando todavía no era “guay” y me decían que tenía que dejar de hacerlo, que ya era universitaria.
He asistido a meditaciones, charlas y talleres budistas desde hace años, mientras había personas que me advertían que podría terminar en una secta.
Quizás por todo esto, eliges añadir a tu vida una nueva tarea de autoconocimiento.
Cuando pasan los años, y has logrado superar algunas fases de esa nueva tarea, se manifiesta un cambio en ti.
No sé cómo explicarlo, pero empiezas a sentir que toda esa gente que te juzgaba, ahora siente respeto hacia la persona en la que te has convertido. Supongo que esa paz que vas alcanzando, después de esas luchas internas, se refleja de alguna forma.
No encuentras la paz reordenando las circunstancias de tu vida, sino dándote cuenta de quién eres al nivel más profundo.- Eckhart Tolle.
He pasado por momentos duros por no entender por qué era así de diferente, hasta que caí en un estado permanente de tristeza.
La gente al verme así de triste lo que me repetía una y otra vez era: Pero si tienes una carrera, trabajo, amigos,… ¿Por qué estás así? Es importante ser coherente con uno mismo y no dejarse llevar por lo que toca ahora según la sociedad en la que vivimos.
Es difícil y al principio muy duro.
Tienes que pasar una especie de duelo de tu antiguo yo, de las creencias que tenías, y aceptar las críticas y los juicios de la gente que te importa, pero que no entienden ese cambio. (No se los tomes en cuenta, sus creencias los limitan, y les estás mostrando que una vida diferente es posible, cosa que al ego le incomoda bastante.)
Cuando los actores trabajan en la zona de incomodidad, los espectadores empiezan a sentirse cabreados en la zona de comodidad- Raimon Samsó
Quizás sea más fácil quedarse con los patrones que nos han marcado, vivir así sin hacerse demasiadas preguntas. O intentar ser diferente, pero dentro de un margen en el que la gente lo vea divertido y original. Ceder en algunas cosas para no quedar del todo mal con el entorno y vivir en un estado de distracción y autoengaño.
Cuando pierdes contacto con la quietud interior, pierdes contacto contigo mismo. Cuando pierdes contacto contigo mismo te pierdes en el mundo. Tu sentido más interno de ti mismo, tu sentido de quién eres, es inseparable de la quietud. Ese es el Yo Soy que es más profundo que el nombre y la forma.- Eckhart Tolle
Creo que he pasado por todos esos estados. Pero ninguno me ha dado la paz y la satisfacción que tengo ahora. Un estado en el que he aprendido a escucharme, entenderme, no juzgarme (me ha costado mi tiempo y mis luchas internas).
¡Esto es un continuo aprendizaje!
Y no quiere decir que haya conseguido ya todo lo que deseo. Estoy todavía a medio camino, pero todos los días me levanto motivada para trabajar un poco más en conseguirlo, y he dejado de sentirme culpable por tomar este camino.
Deja de escuchar al entorno, a lo que quieren los demás para ti y descubre que es lo que quieres tú. Conecta contigo y con tu esencia.
Cada persona está lidiando con sus miedos y si no te apoyan es su ego el que está hablando. No los escuches. Enfócate en la vida que quieres vivir y traza un plan de acción para alcanzarla.
Libros recomendados:
- Sé tu mejor aliado, Mónica Fusté
- El Poder del Ahora, Eckhart Tolle
- Los cuatro acuerdos, Dr. Miguel Ruiz
- Taller de amor, Raimón Samsó
- Volver al amor, Marian Williamson