Deja de escuchar a los demás. Deja de pedir consejo sobre tu situación de vida.
La mayoría de nosotros aconsejamos y damos opiniones desde nuestra experiencia de vida, nuestras historias, traumas, miedos, aprendizajes, lo hacemos desde nuestro filtro personal.
Tengo una amiga, que tiene mentalidad de escasez, y además, no sé si también de no merecimiento. Cuando ella propone sitios para tomar algo, son lugares que no son bonitos, o tienen buena comida, es como que de forma inconsciente no se plantea sitios bonitos para ir. Yo por el contrario, si voy sola o acompañada a tomarme algo, busco un sitio que me encante, o al menos, que me guste y me sienta cómoda, que sea bonito. En este ejemplo, mi amiga, quizás viene de un entorno en el que no se dio importancia a buscar la belleza, a rodearse de entornos que sean agradables, que sean lo mejor. Con el tema de dinero también le ocurre lo mismo, sus conversaciones son de ganar poco, pedir poco para cobrar, etc.
En este caso, si yo le pido que me ayude a elegir un lugar para ir a cenar sola o acompañada, sé que me va a aconsejar desde su filtro. No será un sitio espectacular, y tal vez ni bonito, ni la comida sea buena.
Por eso es importante, no pedir consejo a todo el mundo, y si lo haces, saber a quién se lo pides. En temas personales quizás es un poco más complicado, cuando hay emociones implicadas.
Cuando pedimos consejo a alguien sobre algo personal, recuerda que esa persona tiene aproximadamente un 1% de la información de lo que le estás compartiendo, además de venir con su propia experiencia de vida, desde la que te responderá.
No tiene toda la información de lo que sientes en ese momento, de lo que has sentido, de lo que te ha llevado hasta el punto en el que estás, de lo que has vivido. No tiene datos totales sobre tus miedos, bloqueos, proceso interno, trabajo, emociones que has tenido que aprender a gestionar, dificultades que has superado, etc.
Esa persona te va a hablar desde su proceso personal. Desde su propio filtro.
Por ejemplo, Si tu pareja decide terminar contigo habrá personas que te digan:
1. Bloquéala, no le hables nunca más. Que aprenda a valorarte, etc.
2. Intenta hablar con ella, igual lo que ha faltado es comunicarse, y saber cómo se siente cada parte.
3. Olvídate, no puede ser todo tan complicado, debería ser más fácil. No fuerces.
4. ¡Ábrete a conocer a otras personas!
5. Estás dando mucho y la otra persona no, la relación está desequilibrada y eso no funciona.
Bien.
Todos esos mensajes no están hablando de tu historia. Están hablando de la historia de cada una de esas personas.
Podemos aquí suponer, de forma resumida, de dónde vienen esas respuestas, porque al final todo es un espejo.
1. Probablemente la gente que te da esta opción, es porque les cuesta poner límites, y conecta mucho con la herida de abandono. “Antes de que me abandonen, abandono, desaparezco para no vivir el abandono, bloqueando a la otra persona y que no tenga acceso a mí.”
2. Personas que han descubierto que lo que les ha funcionado es la comunicación. (Factor importantísimo en todas las relaciones). Quizás quieren entender de dónde viene todo, quieren entender el por qué de las cosas, y quieren que el otro sepa cómo se siente o como se ha sentido. A veces puede ser obsesivo, hay que equilibrar también el querer saber el por qué de todo o querer darle toda la información de cómo te sientes al otro.
3. Personas que han sufrido mucho en sus relaciones, que han dado de más, que han puesto mucha carne en el asador y que les encantaría haber tomado o tomar esa acción de soltar cuando se puso complicado.
4. Personas que les cuesta conectar con su dolor, y creen que conocer a otra persona te va a hacer superar la ruptura de forma fácil. Buscan distracciones para no conectar con el dolor. Igual les cuesta empatizar con la situación, porque pasar por una ruptura les rompería.
5. Aquí están juzgando y etiquetando, además incluso pueda parecer que lo hacen con soberbia. Puede que sean personas que están atrapadas en una relación que quieren soltar, y por eso juzgan y te invitan a romper, porque es lo que les encantaría hacer a ell@s.
Esto es solo un ejemplo de una situación y de la visión de diferentes perfiles de personas.
Está bien compartir con otros cómo te sientes, pero ten cuidado a los consejos, porque si de verdad estuvieran en tu lugar, harían lo mismo que tú, porque estarían en tu lugar, habrían vivido lo mismo que tú, y serían tú.
Así que escúchate, observa tus emociones, aprende a gestionarlas, y cómo puse en un post anterior: la respuesta a las acciones que debes tomar, te llegarán cuando estés en PAZ.
